- Publicado en Ficción
No lleves tu cuerpo a la fiesta
"¿Te gustaría asistir a una fiesta sin tener que ir vestido, ni llevar tu cuerpo ni dinero?", decía la valla, en la curva, sobre la autopista. No obstante la velocidad de su automóvil alcanzó a leer la dirección donde daban las indicaciones. Como la curiosidad pica más que el chili mejicano, algunas personas llegaban buscando una aventura. Allí les ayudaban a sacar de su cuerpo el espíritu para poder asistir a la fiesta.